
Así se vivió desde dentro la Maratón de Zaragoza
Este pasado 16 de abril tuvo lugar una nueva edición de la Maratón de Zaragoza. Antonio Andrade pudo cubrirla en directo y hablar con una de sus participantes que, además de ilustrar la cabecera de este artículo, nos ofreció su punto de vista sobre la prueba.
Durante su última edición, la Maratón de Zaragoza reunió a casi 6000 corredores que, a través de sus recorridos de 10 y 42 kilómetros, entregaron el alma y el espíritu en esta ya reconocida gran fiesta del running. Dicen quienes viven la pasión de este deporte que no hay nada igual. Y, ciertamente, los rostros de las personas que se dieron cita a la decimosexta edición de la carrera así lo reflejaron.
Con notorias mejoras en los circuitos para agilizar el desarrollo del evento y aminorar la dureza de las pruebas, la maratón dio inicio puntualmente en la plaza del Pilar a las 8:30 horas. Tras los estiramientos y calentamientos de rigor, el gremio corredor tuvo la oportunidad de disfrutar de una ciudad completamente entregada al evento. A su paso por paseo Independencia, plaza España, plaza Aragón, las murallas romanas, el Mercado Central, las riberas del Ebro y el Canal Imperial. Las corredoras y los corredores contaron con el apoyo de un público completamente entregado que, kilómetro a kilómetro, les animó a seguir adelante.
Del verdadero motor de una maratón
“El evento me pareció muy bien organizado. El cuidado que pusieron los organizadores fue muy notorio, no se les fue de las manos como ha sucedido en otras maratones. Fue muy evidente que consideraron en todo momento al corredor, que al final es el verdadero motor de esto”. Nos comentó en entrevista, Aidé Gutiérrez (runner mexicana residente en Juneda, Lérida).
“Esta maratón contó con todo lo que un acontecimiento de esta magnitud requiere. Desde el primer momento de mi inscripción, hasta cruzar la meta e incluso después de mi recorrido estuve informada de todo. A mi parecer, nada quedó descubierto”.
Zonas de aparcamiento gratuitas, hidratación durante los recorridos y posteriores, aseos suficientes, zona de fisioterapia gratuita o las duchas disponibles para quienes participaron fueron tan solo algunos de los puntos más destacados de esta maratón.
“Algo que me encantó, fue la participación de las voluntarias y los voluntarios, hicieron un trabajo increíble”, nos comentó entusiasmada la runner mexiquense. Pero también destacó los aspectos más relevantes de su trayecto de 10 kilómetros: “la ruta es muy amigable, tiene poca elevación y es muy lindo poder ir viendo muchos de los sitios más representativos de Zaragoza. Cruzar el Ebro por el Puente de Piedra y volver a un lado del Puente de Hierro fue bellísimo”.
¿Por qué ser runner?
“Es una manera de limpiar mi mente, de organizarla. Cuando corro me gusta imaginar que arreglo al mundo, puedo desconectarme de la cotidianidad, de los conflictos internacionales y del propio estrés. Y me gusta participar en las carreras porque es justo ahí que se pueden ver los resultados de los entrenamientos, del cuidado personal, de la constancia y de la disciplina. Disfruto mucho de correr, me hace consciente de mis alcances y de mis limitaciones. Pero también es grandioso poder retarse una misma, vencer a la mente en esos momentos en que el cuerpo pareciera ya no querer dar más”.
Tras hacer hincapié tanto en la correcta y bien estructurada señalización del recorrido, como en la limpieza de la ciudad. Aidé realizó una reflexión, digna de compartir. “Me encantó que tanto los maratonistas como los corredores de los 10k, recibimos las mismas camisetas conmemorativas. De alguna manera me hicieron sentir que no es imposible alcanzar el nivel de Irene Pelayo o de Javi Guerra (campeones de la Maratón de Zaragoza 2023). En fin, que entrenaré duro porque el próximo año quiero inscribirme a la Media Maratón de Zaragoza, vale mucho la pena”.
Y en verdad espero que todas las participantes y todos los participantes, compartan el punto de vista de Aidé. Porque ciertamente, por poco más de 5 horas, la ciudad fue tomada por un espíritu deportivo amigable y positivo.
Enhorabuena a quienes corrieron los 10 y los 42 kilómetros de esta edición, a quienes llegaron primero y a quienes llegaron últimos también. Porque todas y todos dieron lo mejor de sí mismos.
Texto y entrevista: Antonio Andrade.
Imágenes: Álex Burgaz y Antonio Andrade.

